martes, junio 08, 2010

En el hilo de la nostalgia



Tu voz en el teléfono después de tantos días, después de tantas noches en vela. De evocarla tantas veces. Después de soñar contigo. No creía que esa voz que venía en ese hilo era la tuya, a través del tiempo y la distancia. 


No la reconocí por el miedo que tenía a que no fuera real esa llamada imaginada, esperada, soñada por tantas horas. Las palabras unidas a mi oído por la máquina hacían que el tiempo –detenido en mis sueños– llegara entre ráfagas de silencios. 


Las palabras atragantadas se negaban a fluir, así como las lágrimas atrapadas empezaron a brotar despacio, como señales ardientes de la emoción y el desconsuelo. 


Y tú hablabas de dos pájaros que tejían su nido ante tus ojos, me describías cada movimiento, cada gorjeo, cada aletear, cada ramita endeble en un pico...


Este día fue luminoso porque medía cada una de tus palabras en el recuerdo, cada silencio, cada inflexión de tu voz.


 Será por un tiempo así, dulce recuerdo de tu amor que llega con la nostalgia de saberte alejado –mas no perdido– promesa de los amores que volverán como las golondrinas y las flores de los guayacanes cuando sea su temporada.